The lack of physical (and not virtual) contact is cauterizing our hearts (cf. Laudato Si', 49) and making us lose the capacity for tenderness and wonder, for pity and compassion. | La falta de contacto físico (y no virtual) va cauterizando nuestros corazones (cf. Carta enc. Laudato si', 49) haciéndolos perder la capacidad de la ternura y del asombro, de la piedad y de la compasión. |
